Ahora es una buena oportunidad para sanar las heridas producidas en alguna época de nuestras vidas que pueden habernos dejado lastimados en cierta forma, lo que nos impedirá disfrutar a plenitud del momento presente. El niño interior representa esa parte del pasado a la cual nos apegamos, es esa parte subconsciente que necesita ser liberada, porque de lo contrario sufre. Muchas veces necesita que nos comportemos como un padre, una madre o un hermano mayor, comprensivo, que lo entienda y le hable cariñosamente, dándole la seguridad de que siempre que nos necesite estaremos ahí para ayudarlo a sanar.
Para cuidar de nosotros necesitamos prestar atención y cuidar a ese niño herido que hay en nuestro interior.
Una meditación sencilla, que te ayudará es el ho´oponopono, puedes hacerla cuantas veces sea necesario, sólo tómate un tiempo para ti, no digas “no tengo tiempo” porque tú te lo mereces, eso y muchas cosas más.
De esa manera podrás empezar este nuevo año que se inicia más ligero, con menos cargas y sobretodo habrás borrado memorias que ya no te son útiles para avanzar en tu camino hacia la felicidad.
FELIZ AÑO NUEVO!!!